El motivo principal por el que las empresas salen a bolsa es para obtener financiación. Obviamente pueden hacerlo de más formas, por ejemplo emitiendo deuda, pero esto implica un compromiso de devolución con un interés en un determinado tiempo.
Lo bueno de hacer pública parte de la compañía mediante la emisión de acciones es que se obtiene una financiación cuyo importe no hay que devolver. Desde luego puede recomprar sus acciones con el tiempo, pero insisto, no tiene por qué.
La financiación suele ser el motivo principal de la salida de las empresas a bolsa, pero también puede ocurrir que una empresa decida entrar en el mercado de valores por cuestiones publicitarias. Las noticias sobre los movimientos bursátiles son recurrentes en todos los medios. Ser una compañía cotizada es promoción continua gratis.
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